La Federación, gracias al sistema normativo que existe en nuestro pais, ejerce un monopolio al querer la organización, gestión y control de toda la práctica del baloncesto en nuestra comunidad, y en especial en cada una de las delegaciones que la forman.
Cualquier persona, o entidad ya sea pública o privada pueden organizar sus propias competiciones deportivas sin que pueda ser considerada ilegal, y por supuesto no tiene que pedir autorización a la federación para que pueda organizarla.
La Federación por ley tienen unas funciones públicas delegadas que le permiten oficializar las competiciones que organiza, es decir, que una competición organizada por la Federación, es una competición oficial, siempre que la apruebe la Asamblea de la Federación, que es la única que aprueba las competiciones oficiales. Por lo que cualquier persona, asociación o institución son libres de organizar, participar o promover competiciones sin el sello de oficial.
El colectivo arbitral es el que padece con mayor severidad este control federativo, en su afán de controlar todas las actividades relacionadas con el baloncesto, ya que nos encontramos en el Reglamento General y de Competiciones con el artículo 63, en el que nos dice que los deberes básicos de los árbitros, auxiliares de mesa y técnicos, en el ámbito federativo, los siguientes:
- a) Someterse a la disciplina de la FAB
- d) Asistir y ejercer sus funciones en los encuentros deportivos para los que sean designados
- e) No intervenir en actividades deportivas relacionadas con el baloncesto sin autorización de la FAB.
Aunque parezca absurdo, nos encontramos en la paradoja que para jugar un pachanguita con nuestros amigos tendremos que pedir permiso, el llevar a mi hija a jugar un partido de baloncesto, tengo que pedir permiso; si en mi colegio los chavales me piden que les arbitre un partido, tengo que pedir permiso, menos mal que ha prescrito sino me podrían sancionar.
Por consiguiente si la asociación arbitral a la que pertenezco organiza algún evento, ya sea un partido, un torneo, unas charlas, tengo que pedir a la FAB autorización para poder participar en ellos.
No solamente quiere controlar lo que hacen cada uno en el ámbito federativo, sino también en el ámbito personal, ya que se nos exige pedir permiso para todo lo relativo a cualquier actividad relacionada con el baloncesto, sea federativo o no.
Por cierto, se me olvido pedir permiso para escribir esto.
Por cierto, se me olvido pedir permiso para escribir esto.